Recientemente en una nota el presidente de la FED Jerome Powell comentaba que todos los servicios digitales “gratuitos” no estaban contabilizados en PIB/PNB y por esto no se puede visualizar su gran aporte a la economía, eso es una realidad y también se debe adicionar que muchos de estos servicios apuntan directamente a mejoras en productividad; lo que los hace aún más importantes. Varias preguntas saltan: ¿Qué valor tienen nuestros datos en el mercado? ¿Cuál es el costo no monetario? ¿Quién los compra? ¿Qué hacen con nuestros datos que aparentemente son tan valiosos? Y luego preocuparnos por “¿Cómo los contabilizamos?”
Los usuarios de servicios digitales vivimos en un constante estado de asombro viendo todo lo inventan, nos damos cuenta que es muy útil en el día a día y que, además, todos estos servicios son “gratis”. Y seguimos navegando, descargando, creando usuarios y marcando las casillas de “Acepto las condiciones de uso” sin saber realmente que aceptamos y que hay detrás. El “costo no monetario” sería el seguimiento que estamos padeciendo y sus implicaciones a futuro: movimientos del mouse, smartwatch, “lo borrado”, desplazamientos físicos, gustos, necesidades, etc.; no hay secretos, no hay libertad y los Giant-Tech más poderosos conocen los trapitos sucios de todos y hasta de las figuras más poderosas; nada está oculto bajo el sol, y esto va de la mano con los gobiernos, autoridades y especialmente a los sistemas de control.
Powell ejemplifica una contabilidad basada en cuanto pagaría cada usuario por seguir utilizando cada uno de estos servicios, sin embargo, esto no es un aporte transaccional y su indexación al cálculo del PIB/PNB quedaría comprometida. Si bien la monetización para fines de contabilidad no es una prioridad, se puede crear una bolsa de valores de datos, dónde se vea quién compra y quien vende, cual brinda más valor por precio, que datos se comparten, que datos o perfiles se pagan mejor y realizando un análisis transaccional de la compra y venta de datos y las ganancias generadas por estos datos para calcular su aporte a la economía. Así también se gana transparencia y podremos tasar el valor que un grupo de ciudadanos le da a su libertad y sus secretos. Se debe crear conciencia y cultura, ganar transparencia y actuar de acuerdo para demandar leyes que nos protejan la libertad.
Excelente artículo.
Muy bien dicho Dani!